ARTE DE EROS
Juan Hidalgo
Comisario: Julio Pérez Manzanares
Entre otras muchas cuestiones, que convierten su obra en absolutamente contemporánea, el trabajo de Juan Hidalgo aborda abiertamente la cuestión del erotismo. Junto a la influencia del zen, de la creación experimental y de las nuevas culturas de los sesenta, en su obra es perceptible el eco de la influyente obra de Marcuse, Eros y Civilización, en la que el filósofo plantea la dimensión estética como el ámbito de libertad en el que escapar de las constricciones y reglamentación de la sociedad capitalista contemporánea.
La obra de Hidalgo propone una liberación en todos los sentidos posibles: estético, teórico, genérico, conceptual... Con su práctica "intermedia" consigue mover la belleza del pensamiento al abrirse, como en el zen, a las nuevas realidades planteadas desde la libertad absoluta del arte. Una libertad que, en ocasiones, ha hecho que su obra haya sido mal entendida, e incluso "mal vista", por aquellos para los que el pensamiento debe ser - como para la sociedad represiva de la que habla Marcuse- un elemento inmóvil y fruto de la dominación de la utilidad y el capital. Frente a ellos, la obra de Hidalgo plantea el juego, la gratuidad, el placer, el erotismo o el deseo como fuerzas a través de las que la sociedad puede alcanzar un futuro utópico sin fronteras ni géneros de ningún tipo.